¿Sabemos cómo es realmente el iceberg de las conductas de Bullying?
Por un lado, en la parte que se ve del iceberg, se encontrarían los motes, amenazas, insultos, empujones, patadas y puñetazos. Por otro lado, en la parte que no podemos ver se encontraría la exclusión y manipulación social, los rumores, el menosprecio, bloqueos sociales, hostigamiento, aislamiento y problemas de salud mental.
¿Sabemos cómo podríamos identificarlas en nuestros hijos?
Nuestro hijo/a ha comenzado a tener síntomas depresivos, se encuentra en continuo estado de alerta y se asusta por varias cosas que anteriormente no le asustaban, posee menor autoestima, problemas para conciliar el sueño y pesadillas, alimentación alterada, le cuesta trabajo ir al colegio, pierde prendas de ropa y libros. llega con arañazos o moratones a casa, con frecuencia tiene dolores de cabeza y de estómago.
Hoy en día somos conscientes que nuestros hijos bromean mucho en los colegios, pero…¿Cuándo realmente deja de ser una broma? cuando la persona que la está haciendo es la única que se ríe junto al grupo de amigos que lo/a acompañe y existe otra persona que puede estar sufriendo la consecuencia de dicha broma. Así pues, bromear tiene sus límites.
El acoso escolar puede afectar de forma muy negativa a la autoestima de nuestros hijos, en el rendimiento académico, al ámbito social y a la salud mental (sintomatología depresiva y ansiosa, y pensamientos autolíticos, entre otras cosas).
Existen 3 tipos de acoso escolar: social, físico y verbal, Y NO ERES CULPABLE DE NINGUNO DE ELLOS. PIDE AYUDA.
Contáctanos y síguenos en Facebook e Instagram.